Explorando el Desierto de la Tatacoa
A medida que avanzábamos por el Desierto de la Tatacoa, el paisaje árido y rocoso se extendía ante nosotros sin fin. El sol abrasador parecía fundir la tierra con el cielo azul intenso. En medio de la inmensidad, nos sentíamos diminutos pero a la vez conectados con la majestuosidad de la naturaleza.